El descontrol continúa en la zona turística más importante de la Isla, a pesar de las ordenanzas municipales y denuncias de los empresarios de ocio y restauración afectados. Afirman que se necesita “más seguridad, limpieza y erradicar el consumo de alcohol en la vía pública”, sin tener que esperar a planes de reconversión en los que ya no confían.
DIARIO DE MALLORCA