La zona Intramuros donde se encuentran los locales de ocio nocturno de Plasencia deja de ser “saturada de ruidos”.
El Ayuntamiento se comprometió a tramitar la petición de los vecinos a la Junta de Extremadura en 2013, si bien finalmente no lo hizo porque las mediciones preliminares que encargó dieron un nivel de decibelios inferior al máximo permitido.