La presencia policial es habitual en la zona de copas y los agentes controlan que las puertas de los locales no estén abiertas, que los establecimientos cierren a la hora establecida y que no sobrepasen el aforo permitido.
La presencia policial es habitual en la zona de copas y los agentes controlan que las puertas de los locales no estén abiertas, que los establecimientos cierren a la hora establecida y que no sobrepasen el aforo permitido.