Comenzará con 18 locales para extenderlo a otros 562 hasta el año 2015. La Ley de Ruido obliga a los empresarios a instalar un limitador de volumen en sus equipos de forma que los técnicos de la Administración puedan acceder al limitador de forma remota y visualizar en tiempo real los niveles sonoros existentes en el local y las posibles incidencias».