Una novedad del nuevo texto es que los titulares de los establecimientos pasan a tener la responsabilidad de los ruidos y molestias que se generen ante las puertas de sus locales, si bien el Ayuntamiento podrá actuar de oficio o por denuncia.
Una novedad del nuevo texto es que los titulares de los establecimientos pasan a tener la responsabilidad de los ruidos y molestias que se generen ante las puertas de sus locales, si bien el Ayuntamiento podrá actuar de oficio o por denuncia.