Medio Ambiente estudia un modelo de toldos que absorba el ruido de las terrazas. El Ayuntamiento está haciendo pruebas para calibrar el descenso de la contaminación acústica con estas medidas y que podrían rondar los 3 decibelios. Los toldos se complementarían con tapices que eviten el ruido de arrastrar sillas y mesas.
LA OPINION DE MALAGA