FASYDE, Federación de Asociaciones de Ocio Nocturno de España, ha celebrado ayer su primera Asamblea General, tras la posibilidad de integrar a otras actividades distintas a Salas de Fiesta, Baile y Discotecas, que eran las actividades que anteriormente la integraban.
La incorporación de otras actividades, propias del ocio nocturno, servirá para poder defender los derechos de los empresarios de un sector que en la actualidad, al encontrarse dividido, difuminaba sus actuaciones sin obtener los resultado previstos ni el reconocimiento que merece.
La Asamblea celebrada ayer en CEOE, ha servido para fijar criterios de la necesaria unidad de acción, establecer los objetivos prioritarios, incentivar a todos los integrantes a aportar las colaboraciones y ofrecer la integración de todas las Asociaciones Empresariales del Ocio Nocturno.
FASYDE representa, desde su origen, la totalidad del espacio geográfico español de la actividad de salas de fiesta y discotecas. Ahora con la incorporación de Asociaciones Empresariales de otras actividades y de distintas provincias se ha convertido en el referente del ocio nocturno de España.
El plenario también trató las negociaciones con SGAE, AGEDI y AIE, sobre el Convenio para la aplicación de las tarifas de propiedad intelectual gestionadas por estas entidades, quedando de manifiesto que aún existen diferencias importantes. Las condiciones inamovibles, por parte de las entidades de gestión están dificultando el acuerdo. FASYDE fue la primera Federación nacional que suscribió Convenio de aplicación de esas tarifas y en la actualidad se plantean nuevas condiciones.
Finalmente se trató la necesidad de continuar las gestiones necesarias para que el tipo de IVA del 21% exigido se modifique en el sentido de que su aplicación se realice de forma justa y no discriminada para el sector del ocio como en la actualidad se está realizando por parte del Ministerio de Hacienda.
Los asistentes destacaron la importancia que el sector del ocio tiene en la proyección turística de España y en la calidad de servicio y responsabilidad social que ofrece precisamente durante las horas que el turista nacional o extranjero necesita ocupar su ocio cuando otras ofertas de carácter cultural o gastronómico han cerrado sus puertas.